El pasado 10 de septiembre se conmemoro el día mundial para la prevención del suicidio, organizado por la Asociación Internacional para la prevención del suicidio (IASP) en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

A nivel mundial mueren más de 800 000 personas de manera anual a causa del suicidio. Esto se traduce a que muere una persona cada 40 seg. Superando la cifra anual de homicidios la cual es de 500 000.

En México es la segunda causa de muerte en adolescentes, sin duda es una problemática alarmante ya que las cifras van en ascenso. De acuerdo con el INEGI en 2006 en México la cifra ascendía a 4 277 suicidios, mientras que para el 2007 la cifra aumento a 4 394 de los cuales fueron 3 620 hombres mientras que las mujeres que se quitaron la vida fueron 773 en dicho año.

Las cifras son alarmantes, todos tenemos el poder de ayudar a combatirlas. Por eso despejaremos algunos mitos que rodean el suicidio

• LAS PERSONAS QUE HABLAN DE TENER LA IDEA DE SUICIDARSE QUIEREN LLAMAR LA ATENCIÓN.

FALSO. Si algún amigo o conocido habla acerca de la idea del suicidio, escúchalo es un llamado de auxilio. Si lo comenta es porque está considerando la idea.

• DECIRLE A LAS PERSONAS QUE ACABAN DE TENER UN INTENTO SUICIDA “ECHALE GANAS”.

FALSO. No es solo cuestión de ganas, las personas que intentan suicidarse no quieren acabar con su vida, quieren acabar con su sufrimiento. Aunque tengan las ganas de salir adelante lo que necesitan es ayuda profesional.

• LAS PERSONAS CON IDEAS O INTENTOS SUICIDA SON DESEQUILIBRADOS MENTALES.

FALSO: Algunas personas presentan el trastorno de depresión, teniendo sus capacidades cognitivas integras. Sin embargo, lo que los orilla a estas ideas o decisiones es el peso del ámbito emocional.

• SI ALGÚN CONOCIDO HABLO DE LA IDEA DE SUICIDIO HACE TIEMPO Y YA NO DICE NADA ES POR QUE YA SE ENCUENTRA BIEN.

FALSO: Aun tiene el riesgo de llevar a la practica la idea del suicidio si no ha sido atendido por profesionales que le ayuden a estabilizarse.

• SI UNA PERSONA QUE ESTABA MUY ANGUSTIADA Y TRISTE HABLANDO DE SUICIDIO, AHORA ESTA FELIZ ES POR QUE YA LO SUPERO.

FALSO: Algunas personas con ideas suicidas se comportan de forma habitual y tranquilas porque creen que ya encontraron la solución a su malestar. El riesgo está presente y es mayor.

• NO PODEMOS HACER NADA POR PREVENIR LOS SUICIDIOS YA QUE LA IDEA DE HACERLO LA TIENEN DE FORMA ESPONTANEA.

FALSO: Una persona que tiene la idea de suicidarse manda varias señales, en ocasiones lo dice abiertamente o empieza a arreglar sus asuntos, regalando pertenencias, incluso despidiéndose.

• LAS PERSONAS CON IDEAS O INTENTOS SUICIDAS SON PECADORES O COBARDES.

FALSO: No es correcto juzgar a las personas, debemos ser empáticos e intentar comprender que es lo que está pasando por la vida de esta persona que la mejor idea que encontró es atentar contra su vida. Le podemos ayudar a conseguir ayuda profesional.

¿CÓMO LO PODEMOS DETECTAR?

• SENTIMIENTOS DE DESESPERACIÓN Y FALTA DE ESPERANZA: A menudo las personas que tuvieron algún intento suicida expresaron a las personas de su alrededor sentimiento de soledad, tristeza, desesperación o que no encuentran la salida a sus problemas.
• ORDENAR SUS ASUNTOS: Es común que las personas que tienen la idea de suicidarse empiecen a ordenar sus asuntos como propiedades, deudas para el bienestar de la familia en su ausencia.

 

• INVESTIGAR ACERCA DE LA MUERTE O SUICIDIO: investigan acerca de las formas efectivas de realizarlo, los niveles de sufrimiento, duración de descomposición, etc.

 

• ABUSO DE ALCOHOL Y DROGAS: Una persona que tiene depresión y llega a consumir este tipo de sustancias, tiende a empeorar sus síntomas, ya que como bien sabido estas sustancias alteran el sistema nervioso.

¿CÓMO PODEMOS AYUDAR?

• Si notas algún cambio de comportamiento en familiares o amigos, platica con él, muestra tu afecto y preocupación por él, hazle ver que no está solo.
• Si algún conocido menciona de manera explícita su idea de suicidarse ofrécele ayuda para buscar ayuda de un profesional.
• Es de vital importancia ser empáticos y ponernos un momento en sus zapatos para poder entender lo que les angustia. Esto con la finalidad de que ellos se sientan comprendidos y perciban las genuinas intenciones de ayuda que le ofrecemos.

 

• Tener paciencia, ya que el tratamiento de estos casos lleva su tiempo dependiendo de la problemática. En el proceso existen altas y bajas, por lo que es de vital importancia ser paciente en el acompañamiento.

 

La mejor forma de ayudar es escuchando lo que la otra persona nos intenta transmitir y no solo enfocarnos al mensaje explicito. Al igual estar atentos a los cambios súbitos de hábitos o actitud, una sola acción puede marcar la diferencia .